Helena Peñas: “Los objetivos de descarbonización y los principios de la economía circular deben ir de la mano en la transición energética”
Norvento Enerxía es una empresa con sede en Lugo que cuenta con cuatro décadas de trayectoria en el sector de las energías renovables. Norvento desarrolla y opera grandes plantas de generación renovable, diseña y fabrica tecnología para la generación y almacenamiento de energía, y provee de soluciones energéticas avanzadas para el autoconsumo a clientes industriales de todo el mundo.
En su trayectoria siempre han estado presentes valores basados en la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación, así como la sostenibilidad y el respeto hacia el medio ambiente, lo que ha hecho que se alíe con CETIM Centro Tecnológico, a través del proyecto ZEPPELIN, que busca obtener Hidrógeno Verde basándose en una economía circular.
Hoy hablamos con Helena Peñas, Responsable de Bioenergía y Gases Renovables en Norvento Enerxía, que analizará la situación actual de la energía renovable y nos dará las principales claves para enfrentarnos a los nuevos retos que nos depara el futuro de este sector, deteniéndose en el papel del hidrógeno como nuevo vector energético.
Norvento es una empresa pionera en energías renovables. Sus orígenes se remontan a 1981, y desde entonces se han ido introduciendo en diferentes sectores (hidroeléctrico, eólico, biogás, solar, autoconsumo, etc.) ¿Cuáles son los principales mercados de actuación de la empresa hoy en día?
Norvento es una empresa en crecimiento en un sector en auge. Desde sus orígenes, ha ido evolucionando en su portfolio, procurando anticiparse al mercado y poniendo siempre el foco en la innovación al servicio de la transición energética.
Actualmente, Norvento desarrolla y opera gran generación renovable de diferentes tecnologías. Principalmente instalaciones eólicas, teniendo en cartera adicionalmente unos 1.000 MW en desarrollo actualmente dentro y fuera de nuestro país.
Otro campo de actuación de Norvento es el de proveer soluciones energéticas avanzadas en renovables, adaptadas a las necesidades de cada cliente. Aquí se incluyen servicios basados en gases renovables, fotovoltaica y almacenamiento energético. En muchos de estos proyectos, Norvento comercializa productos de tecnología propia, otro de los principales activos de la empresa, entre los que se encuentran aerogeneradores de media potencia, convertidores o sistemas contenerizados de almacenamiento.
El COVID-19 y la guerra de Ucrania han provocado un alza considerable de los precios de la energía en general, y del gas natural en particular. ¿Qué papel cree que juegan los gases renovables en este contexto de necesidad de acelerar la transición energética?
Para cumplir los objetivos de reducción de Gases de Efecto Invernadero (GEI) que se plantean, todo apunta a una progresiva electrificación renovable, y a darle impulso a una mayor flexibilidad del sistema para gestionar excedentes -almacenamiento energético-.
No obstante, conseguir emisiones cero con horizonte 2050 implica la descarbonización total de la economía, incluyendo aquellos sectores más difícilmente “electrificables”, como la demanda de calor industrial o el transporte pesado. En este contexto, los gases renovables (biogás, hidrógeno) contribuyen a resolver ambas problemáticas -almacenamiento, descarbonización-, por lo que se anticipan como una pieza clave en nuestra economía para alcanzar la neutralidad.
Por otro lado, el conflicto bélico y las crisis recientes (sanitaria, económica) han generado perturbaciones en el mercado de la energía, e impulsan colateralmente aquellos proyectos que favorecen la independencia energética de los consumidores, a cualquier nivel. Así, desde inicios de 2022, el precio del GN se ha incrementado de forma drástica, favoreciendo los proyectos de gases renovables, que ya gozaban de un interés creciente en los últimos años.
Ha pasado casi una década desde la primera planta de biogás de Norvento. ¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta actualmente la producción de gases renovables y las palancas necesarias?
Así es. Norvento se inició en el mundo del biogás de forma pionera en Galicia, y cuenta actualmente con varias plantas propias de este gas renovable, alguna con casi una década en operación. Lo cierto es que, aunque el biogás es una tecnología madura y con gran trayectoria fuera de España, el sector aún está “despegando” en nuestro país, y para agilizar su despliegue es necesario vencer las barreras que lo dificultan todavía. Algunas de esas barreras incluyen un marco regulatorio complejo, afectado por la numerosa legislación sectorial. Los largos períodos de tramitación podrían hacer inviable la ejecución de algunos proyectos en el corto plazo.
Otra medida clave para promover proyectos de gases renovables en España es la puesta en marcha de sistemas de incentivos que impulsen su generación y consumo. Un ejemplo son las “garantías de origen”, recientemente aterrizadas en España, y cuya función es acreditar ante un consumidor final que el gas adquirido ha sido producido a partir de fuentes renovables.
¿Qué supone la irrupción del hidrógeno como nuevo vector energético?
Aunque no es la primera vez que el hidrógeno se posiciona para irrumpir en el panorama energético, en el contexto actual -despliegue masivo de energías renovables, objetivos de descarbonización, etc.-, este gas renovable emerge como eslabón clave para el aprovechamiento de excedentes de energías renovables, y descarbonización de la demanda energética no eléctrica. Sin olvidar la descarbonización de los usos habituales del hidrógeno como materia prima -refinerías y producción de fertilizantes-. Para satisfacer esta demanda de hidrógeno ya existente (más de 70 Mt anuales) se estima que se utiliza el 6% del gas natural a nivel global, con la consecuente emisión de CO2 equivalente…
Para la implementación a gran escala del hidrógeno verde, la madurez tecnológica industrial de la cadena de valor es suficiente como para que en ningún caso la barrera sea de naturaleza técnica. Las barreras (adaptación infraestructuras, coste de producción, regulación…) dependerán de cada aplicación para el hidrógeno verde, y serán en función del mercado.
En el proyecto MISIONES de investigación industrial ZEPPELIN, Norvento colabora con CETIM y un consorcio empresarial puntero en la producción de hidrógeno verde a partir de la valorización de subproductos y residuos. ¿Cuál será la relevancia e impacto de la aplicación de la economía circular para la producción de hidrógeno en el futuro?
Consideramos que los objetivos de descarbonización y los principios de la economía circular deben ir de la mano en la transición energética. En este sentido, adecuar u optimizar la gestión de residuos es clave para la mitigación de emisiones GEI. Igualmente, la promoción de proyectos de simbiosis industrial -los residuos o subproductos de una industria pasan a ser materias primas para la misma u otra-, favorece ya hoy la entrada de gases renovables -biogás o biometano- en el panorama energético.
Dentro del proyecto Zeppelin, Norvento investiga junto a CETIM un proceso denominado “fermentación oscura”, que persigue generar hidrógeno a partir de residuos y subproductos orgánicos, por medio de un proceso biológico -similar a la digestión anaerobia-. Actualmente el nivel de desarrollo es medio, pero se esperan importantes avances en los próximos años para esta tecnología y sus variantes, que presenta grandes ventajas para la generación de hidrógeno verde respecto al proceso convencional, como la no necesidad de agua o energía.
«Contar con un centro de investigación multisectorial de referencia como CETIM, enriquece los intercambios y cataliza la concepción de nuevas ideas, además de favorecer el avance de los proyectos»
¿Qué impacto tiene para Norvento la participación en proyectos de este tipo?
Para Norvento, la participación en este tipo de proyectos es de gran importancia, ya que nos sitúa a la vanguardia tecnológica para hacer frente a los retos ligados a la transición energética, y nos permite investigar y constatar de primera mano el potencial de tecnologías y procesos incipientes, así como avanzar en el desarrollo propio de procesos específicos. Todo esto redunda en una mayor capacidad de respuesta y más versatilidad a futuro para nuestros clientes.
Además, contar con un centro de investigación multisectorial de referencia como CETIM, con el que ya llevamos tiempo trabajando bajo un modelo de colaboración abierta y colaborativa, enriquece los intercambios y cataliza la concepción de nuevas ideas, además de favorecer el avance de los proyectos.
Las Administraciones están impulsando los gases renovables, con la creación de diferentes iniciativas o instrumentos como la “Hoja de Ruta del Hidrógeno” y la “Hoja de Ruta del Biogás”. ¿Qué importancia tiene este respaldo? ¿Permitirá que biometano y biohidrógeno se consoliden en Galicia y España?
En Norvento nos parece fundamental el impulso a los gases renovables por parte de las Administraciones, y entendemos las Hojas de Ruta como un primer paso esencial que traza el camino a seguir y recoge las intenciones y posicionamiento de España respecto al desarrollo de los gases renovables.
En el caso del hidrógeno, aunque existe un gap entre las ambiciones reflejadas y el progreso de la capacidad real de ejecución, los datos avalan que se avanza a buen ritmo y que España responde de forma alineada con UE a los objetivos marcados (indicadores a 2030) tanto en capacidad de electrólisis como en % de reemplazo de H2 gris. Creemos que en España será de especial relevancia la implantación de la economía del hidrógeno verde, ya que no se dispone de recurso fósil, pero sí de recurso renovable en abundancia (prospectivamente a más bajo coste).
En el caso del biogás, entendemos que la Hoja de Ruta llega en un buen momento (mucho interés latente, proyectos en curso…). Aunque quizás nos resulte poco ambicioso (objetivo de 10,4 TWh frente a los más de 130 TWh de potencial a priori disponible), es positivo que el planteamiento recoja todas las aplicaciones (autoconsumo, biometano, vehicular) ya que varias tipologías de proyectos podrán convivir según las particularidades específicas, tanto aquellos que busquen captar gran cantidad de residuo como otros de menor tamaño que persigan un modelo resiliente de autoconsumo bajo una promoción privada.
En esta misma línea, a nivel internacional, la Comisión Europea aprobó en 2020 el Pacto Verde Europeo, un conjunto de medidas para alcanzar la neutralidad climática de aquí a 2050 en la Unión Europea. ¿Cree que vamos en el buen camino? ¿Qué papel espera desarrollar Norvento para alcanzar este objetivo?
El objetivo final es la reducción, en 2030, del 55% de las emisiones respecto a 1990 y conseguir que la UE sea climáticamente neutra en 2050. Los objetivos que se persiguen son ambiciosos, en un contexto global en el que la demanda de energía primaria sigue aumentando (el sector de la energía es responsable del 44,3% de las emisiones de GEI). Sin embargo, el final del camino está trazado y los diferentes países están aunando esfuerzos para descarbonizar este sector con el necesario despliegue de las energías renovables y la introducción de los gases renovables en el panorama energético global.
Norvento, con su capacidad de actuación integral en el sector de las energías renovables, y su experiencia acumulada, afronta estos retos con confianza y siempre con el objetivo de seguir ofreciendo las mejores soluciones para sus clientes, siempre alineadas con los principios de la transición energética y la sostenibilidad.
EN DETALLE Norvento Enerxía es una empresa familiar gallega, con sede en Lugo, que diseña y fabrica aerogeneradores y convertidores electrónicos, proyectos de generación distribuida y microrredes. Además, se encarga de la promoción, explotación, operación y mantenimiento de grandes plantas renovables. Con el compromiso ambiental en su ADN, lleva trabajando en el sector de las energías renovables desde 1981 y sus continuas innovaciones tecnológicas aportadas a la industria energética ha impulsado su exitoso posicionamiento en el mercado nacional e internacional. |